Editorial Claretiana despidió en un sencillo momento compartido con los empleados de Casa Central y la presencia del P. Provincial, el camino de estos años con el P. Domingo Grillía quien fuera el Director de la Editorial desde el año 2018.
El Hno. Ezequiel ‘Kekey’ Takaya quien será el sucesor de Grillía como Director en la Editorial, invitó a reflexionar sobre el paso de Domingo por la Empresa con la alegoría de una vasija de barro que fue pasando por las manos de todos los trabajadores mientras expresaban sus deseos y agradecimiento. Finalmente, y en referencia a una leyenda, se invitó a Domingo a romper esa vasija y entregar a cada uno sus pedazos. Tal vez el mejor símbolo para estos años difíciles en una empresa que intenta sobreponerse y resignificarse a los embates de las circunstancias, con el esfuerzo y sacrificio del trabajo diario.
Algunas expresiones de quienes hacen Claretiana todos los días, son el mejor resumen del paso del P. Domingo por sus vidas:
¡Gracias, querido P. Domingo por la gran sabiduría, el tiempo compartido y el estar al lado!
Muchas gracias Padre Domingo por la dedicación y el cuidado de nuestra Casa.
Gracias Domingo por la entrega y el servicio. Por la capacidad de escucha y presencia en la Editorial. Por asumir un tiempo tan complejo de gestión. ¡Buen tiempo de vida pastoral y misión!
¡Padre Domingo lo vamos a extrañar, gracias por todo!
Muchas gracias Padre por todo lo que nos brindaste… Gracias x todo lo compartido … ¡Te vamos a extrañar!
Gracias Padre Domingo, por acompañarnos todos estos años, por estar siempre presente, escuchándonos, dándonos ánimo y consejos…lo vamos a extrañar, Dios y la Virgen, lo bendiga en esta nueva etapa.
- Domingo, gracias por acompañarnos y guiarnos estos últimos y alborotados años.
- Domingo lo voy a extrañar mucho
Gracias por todo principalmente por esa escucha atenta, la mirada serena y la sabiduría para afrontar cada desafío.
No habrán faltado desencuentros ni roces en todos estos difíciles años. Pero todos en la Editorial saben que Domingo fue presencia diaria. Escucha generosa y paciente. Compañero de camino. Sabiduría que se retracta y vuelve a empezar. Con la humildad de quien sabe conducir animando y despertando vidas.
Las voces de quienes fueron sus compañeros y compañeras de camino le dejan este mensaje final:
Qué mejor deseo que la poesía cantada del inolvidable correntino P. Julián Zini en “Avío del Alma” para despedirlo y desearle que no sólo se lleve su bolso de viaje si no tambien ese otro “atavío”; el que supo dar en Claretiana, y que va embalado por Pepe, con una factura en blanco que hizo Gustavo, porque es imposible ponerle valor, con el sello de haber hecho bien el trabajo, y desde la distribuidora, con los deseos reunidos de todas las sucursales y las áreas de Casa Central, para su nueva misión:
Le hablamos de llevarse esas ganas de brindarse a todos /Del corazón grande, valiente y capaz de jugarse entero / Y encontrar el modo de salir a flote en la adversidad.
Le hablamos de esa mano tendida y abierta / Con el gesto antiguo de la caridad /Mano de “che amigo” que se da sin vuelta, /Del que abre su puerta y ofrece su pan.
… sepa que, al irse, dejó sus huesos y su corazón, abonando el suelo del que hoy usté sale. ¡y para el que quiso (lo sabemos) siempre lo mejor!
Sus empleados, compañeros y amigos.
